Cornezuelo de Centeno  

El cornezuelo de centeno es el esclerocio (fase de resistencia) del Claviceps purpurea, hongo ascomiceto que parasita el centeno.

La ingestión de pan de centeno parasitado por este hongo, ha dado lugar a intoxicaciones masivas de la población a lo largo de la edad media en Francia, España, Inglaterra, Rusia. Era el llamado Fuego de San Antonio, Fuego sagrado; mal de los ardientes, no son más que nombres diferentes a la intoxicación (Ergotismo) provocado por el hongo. Se presentaba en dos acepciones; el llamado ergotismo convulsivo, que se caracteriza por perturbaciones sensoriales, agitación mental, alteraciones psíquicas, alucinaciones y el ergotismo gangrenosos caracterizado por el ennegrecimiento de la piel y pérdida de miembros (dedos, manos etc) sin hemorragia.

Ciclo evolutivo.

Hasta mediados del siglo XIX (1853) no se llegó a conocer el ciclo completo del hongo pues discurre en dos fases: Una de resistencia en el suelo y otra sobre la espiga del centeno.

En la primavera, el esclerocio que ha pasado todo el invierno en el suelo comienza a desarrollar los estromas que contienen las peritecas en cuyo interior se forman las ascas portadoras de ascosporas. Las ascosporas son llevadas por el viento hasta las espigas del  centeno en donde desarrollan micelios con producción de conidios y conidiosporas y al mismo tiempo originan una secreción dulce (miel del centeno) que atrae a los insectos que se encargan de propagar a otras espigas las conidiosporas. Al final del verano, los micelios se apelotonan para dar lugar al esclerocio que cae a tierra hasta la primavera siguiente.

Son por lo tanto masas en forma de cuerno de unos 3 cm de longitud, de color negro violáceo al exterior, blanco al interior, olor nauseabundo (sobre todo si es viejo) y sabor nauseabundo.

Composición

Alcaloides hidrosolubles (bases solubles en agua. No polipeptídicos) (20% del total) 

Alcaloides liposolubles, polipeptídicos. (80% del total)

Acciones farmacológicas